jueves, 10 de mayo de 2007

oidos neiked II


Tres perlitas que me encontraron esta semana.

La primera, haciendo la cola para pagar el teléfono. Unas cinco personas después de mí no eran suficientes para impedirme escuchar a una de estas viejas fastidiosas que hablan gritao y que se vuelven locas por hacer amigos en cualquier parte donde van.

Después del acostumbrado "¡uy que calor hace!" (muy común por estos días), anzuelo que lanzan los individuos de esta especie para chequear si existe algún incauto dispuesto a escuchar la gran cantidad de ideas sin sentido lógico que son capaces de disparar en ráfagas durante el tiempo que sea necesario (mientras dure la cola)

*Pequeña muestra de la conversación-monólogo:

-Yo tengo un tío político, que vino de Inglaterra y no aguantó esta ciudad. Se mudó pa' una montaña por allá lejísimo donde en el año hay 3 meses de sol y 10 de lluvia...


En la segunda. Me permitirán hacer un poquito de trampa. No la escuché yo, pero me llegó de muy buena fuente. Una doña en la sala de espera de una clínica. La señora no se sentaba, caminaba en círculos alrededor de las sillas. Iba como ensayando algo, como preocupada por un pensamiento insistente. Hasta que se atrevió. Se acercó a la chica que maneja los turnos en la sala y le preguntó:

-Disculpe, señorita, yo vengo a hacerme una placa de tórax. ¿Será que puedo orinar?


Y la última de hoy. Emanada de las delicadas fauces de un compañero de trabajo mientras le comentaba a otro de su última aventura casual en algún hotel de Caracas. Pude haber seleccionado varias de las maravillas que dijo, siempre sazonadas con el acierto que lo caracteriza. Pero escogí esta:

-Que va, hermano. Esa jeva está feísima. Tiene el culo tan chorriao que se tira un peo y levanta tierra.


Hasta la próxima...

4 comentarios:

Anónimo dijo...

*Siempre hay una vieja ladillada que busca agua en fuego para sacar algún tema de conversación con desconocidos..
Fine litro ...

hijo dijo...

esta se la escuché yo a un guevón al otro lado del teléfono: "coño, pero es que ya estoy empillamao..."

no es por tí

Marcos Mendoza Saavedra dijo...

Igual que en el cine con esas doñas del Centro Plaza que sólo van a farandulear; que además no se sinceran consigo mismas y admiten que ya no pueden leer como antes.

Recuerdo con rubor en mis mejillas la vez que fui a ver sólo "Irreversible", en algún festival de cine francés de antaño; y en plena escena de violación una señora le hacía leer a otra - más o menos contemporánea - lo que decían los subtítulos a todo gañote. Creo que eso influyó que se salieran más de 15 personas de la sala.

PD: me encantó lo de la "levanta tierra", jeje

Anónimo dijo...

Tengo que compartir con ustedes algo que me dijeron y que me pareció realmente absurdo:

"¿Y viste que ahora no se puede usar hilo en la playa?"
"¡Sí, sí. Él lo dijo, chama. Los guardias nacionales nos van a multar!"

...
(jajajajajajajajajajajajajajajaja. Por favoorrrr!!!!)